Ernesto Abad y Soria
“Como la mujer honrada ni siquiera tengo historia pues no me ha pasado nada soy Ernesto Abad y Soria”
Semblanza
Poemas
Tésis Recepcional
Semblanza
Nacimiento: Zacatecas, Zac. Febrero 26 de 1911.
Padres: José de Jesús Abad Félix y Carmen Soria Rivera.
Esposa: María del Refugio Sánchez y Velasco.
6 Hijos: Jesús Ernesto, María del Carmen, Georgina Guadalupe, Antonio Rodrigo, Eugenia Marisela y Roberto Alejandro.
Educación Primaria: Escuela Juan de Dios Peza (S.E.P.) Villa de Guadalupe, D.F.
Educación Comercial
Elemental: Escuela Comercial Dr. Mora (S.E.P.) México, D.F.
Estudios Profesionales:
Escuela Superior de Comercio y Administración (S.E.P.): 1926 a 1928.
Escuela Nacional de Comercio y Administración: 1929 a 1935.
El alumnado de la E.S.C.A. paso a formar del nuevo plantel universitario cuando le fue concedida a la U.N.A.M. su autonomía. Le fueron revalidados los estudios de la E.S.C.A. y logró completar los estudios de Contador Público a base de cursos libres, por motivos de trabajo.
EL HOMBRE Y EL MAESTRO
Dicen que hay personas que en el nombre llevan la fama, curioso, aquí esta situación se da a través de la semejanza de nombre y apellidos con las letras. Desde la importancia de llamarse Ernesto de Wilde, hasta la luz de los Campos de Soria del poeta granadino. Es larga, pero aun insuficiente para su enseñanza la vida del maestro, siempre en el orgullo de su profesión, pasa de cerca por la historia de México postrevolucionario hasta el momento actual, dejando tras de si la este la de su honradez, de hombre de bien. ¡Que claras sus palabras de homenaje y devoción por su maestro Maximino Anzures! Debieran ser ejemplo para todos los que recibimos de alguien el privilegio de usar la razón para enseñar.
Pasa por las aulas, desde 1942, aportando experiencia e ideas jóvenes, pone énfasis en los seminarios para acrecentar el número de graduados, se extiende a múltiples excuelas como docente y recibe toda clase de distinciones y homenajes. Es de los hombres a quienes los años, refrescan, que no envejece porqu econseva la frescura del humor, porque como él dice: En el fervor del aula dar conciencia. Tillando, que el amor es arquitrabe, de toda profesión y toda ciencia.
Esa es la definición de su quehacer terreno, el posterior se lo entrega a Dios en las palabras de homenaje -como hombre enamorado y amoroso- a su esposa y sus hijos. De devoción a su maestro agradecido. A su profesión, como hombre convencido del valor de su paso por el aula y su paz por este mundo. Finalmente, Hombre Integro.
Es pues una especie de Abad laico, metido en la prosapia de la enseñanza y convertido en poeta por el aroma de su tierra y el amor al projimo.
Asi es Ernesto para mi. En breves palabras: El Maestro.
Dra. Ma. De la Luz Paniagua Jiménez
POESIA
Balance Poético
Otros Sonetos
Epigramas
Escritos Originales
Ni arrullo ni fatiga,
ni tenaz siempreviva
ni jazmín florecido;
no hallarás quien te diga
cuánto yo te he querido.
Ayer
Ni música en sordina
ni melodiosa rima:
ni el guiño de un lucero
ni e agua cristalina,
dicen cuánto te quiero.
Hoy
Postrera margarita
-mutilada y benditaSerá quien sintetice
mi apasionada cuita:
dirá cuánto te quise…
Después
¡Tus andares! Que rimas deliciosas,
debieran deslizarse en perdería,
o en palabras de ardiente idolatría
o en capullos y pétalos de rosa.